Con las primeras nieves de la temporada, el interés de la población por disfrutar de los paisajes nevados y las ganas por practicar deporte en este escenario es inevitable, pero recordemos que deben tomarse una serie de precauciones para que la visita a la montaña sea segura.
A la hora de afrontar el desplazamiento, se aconseja consultar con antelación el estado de las carreteras y adoptar ciertas medidas de seguridad invernal en el vehículo: revisar niveles, comprobar el buen estado de los neumáticos, llevar el depósito lleno, las cadenas adecuadas y algo de comida y agua, así como un saco de dormir o manta. Durante la conducción, se recomienda mantenerse siempre en vías principales, aumentar la distancia de seguridad, reducir la velocidad, utilizar las marchas largas, y evita frenadas o maniobras bruscas.
La planificación de actividades en el entorno de montaña nevado debe realizarse en lugares conocidos. La duración de la actividad tendrá que estimarse para que se disponga de tiempo suficiente para alcanzar el objetivo sin que se haga de noche, ni en la montaña, ni en la carretera de vuelta a casa. También debe tenerse en cuenta el parte meteorológico previsto y estar atentos a su evolución.
Es necesario equiparse adecuadamente, tanto con ropa como con material de montaña e instrumentos de navegación. Salvo que se trate de deportistas experimentados, los movimientos deben limitarse a itinerarios con poca pendiente y en zonas boscosas. En caso contrario, desde FEMECV se recomienda llevar, y que todos los miembros del equipo sepan utilizar, el detector de víctimas de avalancha (DVA), sonda y pala.
Para poder afrontar cualquier imprevisto, se aconseja llevar un teléfono móvil protegido y con la batería cargada, botiquín, saco de dormir y funda de vivac, frontal, silbato, agua y comida.
 
Por último, desde la Vocalía de Seguridad y Salud recuerdan que la montaña en estas condiciones entraña un riesgo para el que son necesarias técnica y experiencia y recomiendan a las personas que no cuenten con la preparación adecuada que participen en las actividades de los clubes de montaña o contacten con una empresa de turismo activo o un guía profesional.